RESEÑA HISTORICA

En la década de los 60, el coro de la Iglesia Bethel, dirigido por el pastor y fundador Archie Cameron era muy popular y viajaban frecuentemente alrededor de Honduras, deleitando con sus presentaciones. El tío Archie (como se le conocía con cariño) tenía una visión clara: formar también, una banda musical, sin embargo, carecía de instrumentos musicales. Lamar Crumbley, dueño de un negocio de instrumentos, y un maestro de la comunidad de Tela donaron algunos instrumentos viejos, y el tío Archie adquirió varios más para completar el inventario.

Una vez obtenidos los instrumentos, el siguiente paso fue encontrar maestros. El tío Archie enseñó a los trompetistas y trombonistas, mientras que los misioneros Gary Brooks y Karen Crumbley instruyeron a los músicos de clarinete, flauta, Piccolo y otros instrumentos. La banda, en sus inicios, contaba con 25 miembros para conciertos y otros 25 para desfile.

Los integrantes de la banda provenían de iglesias cercanas y del Instituto Evangélico Bethel, y aunque la calidad musical inicial no era perfecta, el entusiasmo era notable. Gary Brooks mencionó: “Tal vez la música no era de mucha calidad, pero el entusiasmo fue excelente. Sonidos de trompeta, clarinetes y saxofones tocando himnos cristianos llenaron de música el valle. Atrajeron a mucha gente a la champa que era la iglesia y muchos escucharon el evangelio por primera vez”.

La banda Bethel comenzó a ganar popularidad en la costa norte de Honduras, siendo invitada a campañas, eventos cívicos y otras actividades.

Su repertorio incluía una mezcla de música clásica, sagrada y popular, y la dedicación del tío Archie era evidente. Testigos afirmaban que en sus presentaciones nunca les cobraba nada, aunque él tenía que pagar el combustible y la comida de los integrantes de la banda. Solo le decían: 'Muchas gracias'. "El tío solo quería ayudar a la comunidad y darles música de calidad".

La comunidad de La Ceiba se maravillaba al ver a los jóvenes marchando en formación y tocando instrumentos que jamás habían visto. Don Francisco (Ex-Director) recuerda: "Cuando llegaba la banda, los del pueblo gritaban ‘¡Maestro, música por favor!’".

En octubre de 1980, los oficiales de la base aérea de La Ceiba invitaron a la Banda Bethel a tocar ante los líderes del país, incluyendo al presidente de la república. Su actuación fue tan apreciada que el siguiente año recibieron otra invitación con varias semanas de anticipación.

El sueño de Don Archie Cameron de tener una banda cristiana de alta calidad se materializó, y bajo la dirección de Don Francisco Raudales, la banda alcanzó aún más fama, logrando premios importantes no solo en Honduras sino también en otros países centroamericanos. Además, la banda fue llevada a Los Ángeles, California, para participar en el desfile del 15 de septiembre, representando con orgullo a Honduras en Estados Unidos.

Los Ángeles California, Estados Unidos, 2008